Los primeros indicios de asentamientos humanos en esta localidad belmezana pertenecen al Neolítico Medio, habiéndose constatado una ocupación clara y precisa en los diferentes hábitats que arrancan desde finales del V milenio a.C, existiendo como ya hemos descrito ayazgos de algunos restos datados en el Paleolítico cuando el hombre aun se integraba en tribus nomadas y aún sin hábitat permanente.

Los hombres primitivos no conocian la escritura, con lo cual no nos pudieron dejar textos que nos puedan ayudar a indicar su forma de vida o los acontecimientos que sucedían en estos remotos tiempos. Todo lo que sabemos sobre la forma en que vivian de estos primitivos hombres es por los estudios realizados sobre los diferentes materiales que se hayaron en las distintas excavaciones arqueológicas, de sus moradas, sepulturas, restos de huesos, de utiles y armas que estos hombres primitivos usaban y también por las diferentes manifestaciones de pinturas y dibujos que estos hombres primitivos fueron realizando sobre las paredes de algunas cuevas y abrigos.

La edad de piedra comprende la existencia de dos períodos con unos rasgos que se diferencian claramente entre sí; la fase más antigua, denominada Paleolítico, y que se caracteriza por los materiales de piedra "tallada" que consistia en el rompimiento por golpeo de la misma piedra en un sentido y dirección determinado hasta conseguir unos filos cortantes, y otro periodo más reciente llamado Neolítico, que se caracteriza por los materiales de piedra "pulida", técnica que consistia en la fricción de la piedra por algun elemento abrasivo mas duro que la desgastaba consiguiendo así un acabado de mayor dureza. Entre estos dos periodos se encuentra otro de transición en el que conviven estas dos manifestaciones del trabajo de la piedra , el Mesolítico.

-Paleolítico, la primitiva edad de piedra , es el que abarca el mas amplio periodo de tiempo y el de más antiguedad del hombre, está dividida en ciclos que estaban marcados por unos constantes progresos en la fabricación de los utensilios cotidianos, de las armas y en el género de vida de sus habitantes. El Paleolítico esta dividido en tres períodos diferenciados, Inferior, Medio y Superior. En la primera etapa de estos períodos, los hombres que lo habitaban solo poseían unos toscos instrumentos de piedra; y a la finalización de estos períodos, en el Paleolítico Superior ya contaban con puntas flecha de huesos afilados o de piedra, hachas, picos, y otros utiles mucho más elavorados. En este ultimo periodo se produce el fenómeno de las primeras representaciones artísticas de nuestra prehistoria, pinturas y grabados al que se le atribuye un sentido de carácter magico-religioso y que el hombre realizaba en los abrigos de piedra o el interior de las cavernas.

Hasta hace unos 20.000 años el hombre vivía en cuevas, y se desenvolvia en una climatología muy adversa que le resultaba muy difícil, eran nómadas, y se integraban en hordas poco numerosas (su demografia era baja y su mortalidad muy elevada), se calcula que durante el período del Paleolítico Superior la Peninsula Iberica contaba con una población aproxiumada de entre 25.000 y 50.000 habitantes, no tenían un lugar fijo para vivir, y sus desplazamientos eran continuos buscando los lugares que le proporcionaran alimento. Cazaban, pescaban y recolectaban los frutos silvestres que encontraban en sus desplazamientos, a esto dedicaban la mayor parte de su tiempo, eran por lo tanto una sociedad de cazadores y recolectores, el hombre busco en su camino los lugares que les ofrecian mayores facilidades para el desarroyo de su vida cotidiana, generalmente en fértiles valles y terrazas de ríos o lagos, como en el caso del Valle del Guadiato, donde encontraban abundante caza, raíces y frutos silvestres, con los que cubrían las necesidades de su alimentación. Este hombre primitivo fue desarrollando diferentes métodos y técnicas de caza, preparando trampas en las veredas de paso de los abrevaderos, desarrolló la técnica del ojeo en la que la tribu asustaba a los animales que se dirigian hacia los cazadores, el camuflaje, el acecho y la sorpresa, y en la etapa final del Paleolítico, se produjo la aparición del arco y la flecha; con ello el hombre podía cazar animales más veloces y a una mayor distancia. Aunque sin duda alguna uno de los mayores logros de la Prehistoria fue el descubrimiento de las tecnicas de encender el fuego, un preciado poder, que les permitia calentarse al amparo de las llamas de la hoguera, asar la preciada carne de la caza, y mantener a cierta distancia a los animales salvajes.

-Mesolitico, también llamado Epipaleolítico. El final de la ultima glaciación dio paso a una fase de transición o adaptación entre el Paleolítico y el Neolítico, en la que las ultimas sociedades cazadoras-recolectoras cambian paulatinamente sus costumbres; de una sociedad nómada con asentamientos estacionales que establecian durante el invierno y mas comodos campamentos durante el verano a una sociedad sedentaria y productora.

-Neolítico, período mas reciente de nuestra prehistoria que se presenta aproximadamente, a partir del 10.000 a.C. caracterizado por los elementos de piedra "pulida". En este periodo se presento un drastico cambio climático que produjo el deshielo y la desaparición de los glaciares, dando paso a un periodo postglacial llamado Holoceno, este suceso obligó a los hombres a tener que adaptarse a una forma de vida muy diferente a la que llevavan hasta este momento, y se presento con una evolucion constante en los conocimientos del hombre, hasta el punto de hablarse sobre este periodo como la Revolución Neolítica, se volvieron productores asentandose a orillas de los lagos y ríos, como es el caso en Belmez de los asentamientos de Sierra Palacios a orillas del Guadiato; el desarrollo que se produjo en la agricultura, en la domesticación de los animales y el pastoreo aseguraron un aumento en la producción de los recursos alimenticios que conllevó un progresivo incremento de la población nativa.

El periodo Neolitico se caracteriza por sus cerámicas lisas de buena elaboración (los restos más antiguos que se conocen en el termino de Belmez, son los procedentes de los yacimientos de Sierra Palacios, tratandose de diversos fragmentos de cerámica, decorada a base de una capa de un pigmento rojo denominado "almagra" resultado de la disolución del oxido de hierro en agua, el cual recubre toda su superficie) y su industria del silex, asi como por la diversidad estructural del ritual fuerario que consistia en enterramientos en fosas individuales, el individuo se situaba en ella con el esqueleto en una posición encogida y rodeado de un ajuar personal funerario.

De este periodo datan los asentamientos más antiguos de la población de Belmez (Córdoba), estos habitats se localizan en la fase anterior a la construcción del dolmen Casas de Don Pedro (Cuando del actual Dolmen solo existian los dos primigenios menhires) así como en el enterramiento de la Cueva de Agustín en Sierra Palacios.

Dolmen "Casas de Don Pedro © by paco MEDINA

Hacia el III milñenio a.C. se inicia el conocimiento del metal y se generaliza la fundición del cobre, este descubrimiento dio paso a una nueva fase de nuestra hisória.

-Edad del Cobre, periodo intermedio entre el Neolítico y la Edad del Bronce, también llamado Calcolítico o Eneolítico, Los restos arqueológicos que mas caracterizan a esta etapa histórica son los monumentos megalíticos, sepulcros colectivos que son construidos a base de grandes y pesados bloques de piedra, de estos monumentos nuestros antepasados nos dejaron en Belmez un extenso y rico patrimonio al que hoy denominamos con el nombre de "Grupo Dolmenico de Belmez".

Las viviendas calcolíticas eran de planta circular construidas sobre un zócalo de piedra y destaca en ellas la carecencia de compartimentos interiores, es el caso de el poblado de Sierra Palacios I, que fué excavado por trámite de urgencia en el año 1985 y que presentó una estratigrafia con niveles pertenecientes al Calcolítico Pleno, y que por la presencia de hayazgos en la excavación de cazuelas carenadas muy probablemente la existencia de esta ocupación sea aún anterior, perteneciente al Calcolitico Inicial; a la fase del Calcolítico Pleno pertenece tambien el habitat del Castillo de Belmez situado en el mismo cerro en el que se asienta el castillo, junto a la actual población.

En esta etapa aparce la cultura del vaso campaniforme caracterízadas por su forma de campana invertida y decoraciones profusas. Su aparición está muy relacionada con la difusión de la metalurgia del cobre y en Belmez se presentó ya en el Calcolítico Pleno al ser un lugar donde se produjo una adopción precoz de la metalurgia gracias a la evolución de las prácticas en la técnica de la mineria y extracción favorecida por la presencia de abundantes yacimientos en el territorio belmezano y el Valle del Guadiato de este mineral de cobre, a la manifetación de este Calcolitico Campaniforme corresponde el que es el enterramiento posiblemente más conocido en Belmez, el  enterramiento de "La Retuerta" o "El Cuadrado" .

El cobre, a pesar de de tener un punto de fusión mas alto que el bronce o el hierro, es uno de los primeros metales que utilizó el hombre primitivo para la fabricación de utensilios, inicialmente fue usado ya en el Neolitico en el estado casi puro en que lo presentaba la naturaleza, ya que no se conocian los mecanismos o procedimientos con los cuales se podría fundir el mineral, en estos primeros momentos, este mineral de cobre era moldeado gracias al uso de las técnicas del martillado y del batido en frío hasta dejarlo en una fina lámina para poder adaptarlo a diferentes formas. El avance de las técnicas cerámicas que dio paso al perfeccionamiento del horno ceramico de cocción, permitiendo la experimentación de los procesos de la metalúrgia, cuando el hombre ya dominaba estos procesos metalúrgicos comenzó a practicar diversas aleaciones con otros minerales, primeramente fueron la mezcla con el arsénico, y mas tarde con el estaño, esta aleación dio paso a un nuevo metal el bronce.

-Edad del Bronce, es el eríodo en el que se desarrollan las técnicas metalurgicas que originaron la aparición de este metal, resultado de una aleación de cobre con el estaño en un horno de carbon vegetal, (aunque el primer bronce que produjo y utilizo el hombre fue el resultante de la aleación del cobre y arsenico), esta aleación del cobre con el estaño produjo un metal de mucha mas dureza y mayor resistencia, mas facil de fundir y mucho mas facil en cuanto a su laboreo que el cobre por si solo, esta fue sin duda alguna la primera de las aleaciones de importancia y la mas innovadora realizada hasta ese momento por el hombre. El claro exponente potencial de la mineria de la zona norte de la provincia de Córdoba impulsó el desarroyo anticipado de este metal en nuestra geografia. Las culturas más importantes de este periodo estan caracterizadas por los poblados que se situaban en las posiciones mas estratégicas y que eran fortificados como el existente en la zona arqueológica de Sierra Palacios I.

La metalurgia del bronce, tal y como pasó con la del cobre, fué únicamente una innovación tecnológica más de entre todas las que se produjeron en este período de nuestra prehistoria, esta innovación, se puede considerar de menor importancia devido a la aparición y al desarroyo en nuestro territorio de las primeras civilizaciones urbanas, (Fenicios, Griegos , Cartagineses...).

-Edad del Hierro, hacia el año 1000 a. C. comienza a difundirse por toda Europa la metalurgia del hierro. transcurre aproximadamente desde el año 1000 a. C. hasta aproximadamente el año 218 a. C fecha del comienzo de la segunda Guerra Púnica, tras la cual los romanos emprenden a partir del año 209 el comienzo de la conquista de Hispania.

Iberos, (asentados ya desde el Neolítico) así fue como los griegos denominaron a los habitantes autóctonos pobladores de la Península, tratándose de diferentes pueblos diferenciados entre si, y que poseían un desarrollo cultural propio como evidencia una lengua y escritura propia, destacándose de entre ellos el pueblo Tartesios ( a los que pertenecian los territorios de Belmez ), como la cultura más avanzada de la época, y sus herederos Turdetanos y Túrdulos , como los más cultos y refinados de todos ellos, el geógrafo, historiador y viajero griego Estrabón escribía en sus crónicas:

"...los turdetanos, herederos de los Tartessos, son de costumbres dulces y cultivadas, tienen fama de ser los mas cultos de entre los íberos, poseen gramática y escritos de antigua memoria, poemas y escritos en versos que ellos dicen de 6000 …"

Al hablar de Turdetania, turdetanos o túrdulos, estamos hablando del mismo pueblo de Tartessos, sólo que en diferentes épocas históricas. Nuestra historia de la minería que tiene una tradición de más de tres mil años fue iniciada por el pueblo tartesio en en la Edad del Bronce, el pueblo tartesio se considera que fue el primer estado de la Península Ibérica, y la cultura mas antigua en este primer milenio a. C. un reino situado en Andalucía occidental en torno al valle del Guadalquivir y que dominaba los filones mineros de nuestra Sierra Morena.

Fueron pues los tartesios los primeros explotadores de los filones de cobre, plata y oro, abundantes en la geografía de nuestra localidad y cuyo refinamiento se evidencia en los vasos cerámicos campaniformes, a esta etapa de nuestra historia pertenece el hayazgo del tesoro del bujadillo y la existencia de un poblado Túrdulo en Sierra Boyera.

Los tartesios fueron también los que iniciaron la explotación del mineral de hierro en la localidad belmezana, explotación que perduro hasta la finalización del imperio de Tartesios con la destrucción de su capital, Tartesos, entre o 520 y o 509 a.C. con la llegada de los cartagineses a la peninsula, periodo en que la mineria sufre una fuerte recesión que duro varios siglos hasta que estas mismas minas de hierro fueron más tarde explotadas por los romanos junto con otras minas de diferentes minerales de la zona. Esta es la última etapa de nuestra prehistoria que, en el territorio belmezano coincide con las diferentes colonizaciones de los pueblos del mediterráneos (fenicios, griegos y cartagineses) y de los pueblos del norte de Europa. La cultura Ibérica, compuesta por los pueblos autóctonos de la Península influenciados culturalmente por los anteriormente mencionados pueblos colonizadores (fenicios, griegos y cartagineses) se extendió por el sur de la península, esta sociedad jerarquizada, con una organización de estados monárquicos (Régulos) formados por una o varias poblaciones. Los Iberos poseían lengua y escritura propia ( caracteres de escritura ibera - Comienzo de la Edad Antigua) y acuñaban también moneda propia, cuyo uso fue introducido por los comerciantes griegos.

La riqueza minera y metalúrgica de nuestra comarca propicio la llegada primero de Fenicios, y mas tarde de los Griegos que llegaron a nuestra población sobre los siglos VII y VI a. C. durante el llamado Periodo Orientalizante, cuando Córdoba se constituia ya como una población de grandes connotaciones urbanas que organizaba y gestionaba un extenso territorio con ámbito en la vega del Guadalquivir y piedemonte de Sierra Morena, el potencial minero de la zona adquiere ahora un mayor auge, estructurándose como uno de los principales focos de aportaciónes mineras para la floreciente industria metalúrgica y para las principales rutas comerciales existentes en época turdetana, antes de la llegada de los romanos, estos pueblos establecieron buenas relaciones comerciales con los pueblos autóctonos de Iberia; relaciones que perduraron a pesar de la oposición de los Cartagineses tras la derrota griega en la batalla de Alalia en Corcega, tras la cual se fue produciendo progresivamente el desplome económico de Tartessos.